La rebel·lió dels tribunals. L’Administració de justícia a Catalunya (1931-1953). La judicatura i el ministeri fiscal

2005, Prólogo de Antoni Segura i Mas, 320 pp.

Este libro constituirá un hito muy importante para comprender y conocer mejor unos años decisivos de nuestra historia reciente. El lector encontrará en las páginas que siguen un relato apasionante —y apasionado— de cuestiones que le son bastante familiares y, en cierta medida, trasladables, con todas las matizaciones que se quiera, a una realidad de hoy mismo que, en este sentido, aún conserva lastres evidentes del pasado. Como ejemplo, es suficiente destacar una de las conclusiones que pone de relieve Federico Vázquez. La llegada de la República supuso el enfrentamiento soterrado del personal de justicia con el nuevo régimen y su clase dirigente, porque “la proclamación de la República había desmantelado el entramado social y político en que se sustentaba”. El choque se acentuó con la proclamación del Estatuto de Autonomía de Cataluña, que suponía “el traspaso del personal judicial a la Generalitat”. Además, la política de depuración del gobierno republicano fue “de poco alcance, y a menudo desatinada y alejada de los valores constitucionales”. En Cataluña, “la inadaptación del personal judicial fue muy patente cuando se le pidió que se integrase ena la cultura catalana: el uso del catalán en la Administración de justicia pasó a ser el centro del enfrentamiento entre la ciudadanía, los profesionales jurídicos y la clase política, por una parte, y el funcionariado, por la otra». Es como si el tiempo hubiese pasado en vano.