L'afrontera. De la dominació a l'art de transgredir

2011, 224 pp.

El arte de transgredir es el caminar irracional del individuo ante una negativa, una difernecia, un nada. Es simplemente la (a)frontera interior proyectada en un territorio físico, en un marco social colectivo, o bien en la representación artística de los gustos de los pueblos. Pensar la frontera es evocar un concepto sorprendentemente atractivo, por su fuerzo política, por su incidencia humana. Pero es, sin duda, una puerta para defender la opción de la transgresión. Frontera como un espacio de libertad, donde el límite se vuelve luz; pero fronter es también un indicio de frustración, de trauma de la agresión sobre colectivos diversos o sobre individuos. Este libro está hecho y pensado desde Perpinyà, pero también en Barcelona, Girona y en el País Valencià, proyectandose hacia los contornos de Europa... Es la propuesta de un experimento o, aún más, la plasmación de una serie de reflexiones llevadas a cabo individualmente, y también en común, desde ámbitos profesionales y sensibilidades diferentes, pero todas con coincidencia de un espacio de (a)frontera, de un mundo de debate a superar y resilienciar las fronteras. Los pensamientos de la filosofía y la lengua sin, juntamente con la historia y la política cultural o económica más prácticas, la manera como se enfrentan y asumen los miedos interiores, es decir, las verdaderas posibilidades de futuro. Y es que hablar de frontera es sencillamente eso: aceptarla, conocerla, transgredirla. Las palabras y las fotografías de este libro son experimentos personales para ir más allá y transgredir toda frontera psicológica o suprapolítica.